El cansancio llega a ti cuando día tras día durante un largo
tiempo te dicen "tú puedes hacerlo". Y cuando tú también lo crees y
crees que todo va a cambiar, que lo malo se esfumará, que el dolor desaparecerá
es cuando poco a poco sin saber cómo, cuándo ni porqué, te das cuenta que nada
va bien. Que el dolor perdura y te acompaña día tras día, que lo malo sigue
ahí. Dentro de ti.
Las lágrimas que cayeron en su día desaparecieron. Mientras
que las lágrimas que permanecen encerradas dentro de ti, no saben cómo ni por
dónde salir...
Y por muchos "todo irá bien" "tú puedes
hacerlo", lo malo te recuerda día tras día "aún sigo aquí".
Y justo en ese instante solo quieres cerrar los ojos, alzar
las manos y soltar la bandera blanca.
by Kinki Pulguita