23 de mayo de 2018

Vuelve conmigo...





Apenas han pasado cuatro días y sigo sin creer que te has ido de nuestras vidas.


Entro en tú casa esperando verte sentado en tu sillón.


Cuando entro y no te veo mi mente me dice "está en el campo. Trabajando como siempre". Y entonces es cuando espero que se acerque la hora de comer, porque sé que es cuando tu llegarás a casa.


Y cuando se pasa un poco de la hora de comer, espero escuchar tu voz diciendo "¡y en esta casa no se come!"


La hora de comer es la hora de comer. Y ahí es cuando todos nos juntamos alrededor de la mesa.


Tiempo compartido en familia, tiempo compartido contigo. Porque después toca volver a salir a trabajar.


 


Gran hombre, trabajador como el que más...


 


Y entonces es cuando la cruda y real realidad vuelve a ti, y recuerda una vez más que ya no estás. Que te has ido; y ya no volverás.


 


Y en ese mismo instante, es cuando me vuelvo a enfadar con la vida. Me vuelvo a enfadar por las decisiones erróneas (o no, quién sabe) que un día tomaron en su momento, me vuelvo a enfadar por haber sido como era, por no ser la nieta perfecta, por no tener la misma ambición por la vida de campo como ella para pasar más tiempo a tu lado y aprender más de ti...


Y una vez más me vuelvo a enfadar por no haberte dicho nunca un no te vayas nunca, un te adoro, un te quiero... Por no haberte estrechado entre mis brazos y abrazarte una y mil veces más...


Te has ido sin saber si yo te quería...


No puedo evitar pensar que te has ido sin sentirte orgulloso de mi. De la clase de persona que era, o que soy, no lo sé...


Hay quien pensará "ya eres mayorcita. Pero yo digo lo mismo que dice el tete Yeray. No quiero que estés en la estrella, quiero que estés aquí conmigo..."


 


Si es que dentro de mi sigue estando mi vocecita con 6 años. Ese recuerdo que un día le dije a mí iaia:


"Iaia: ¿Tú sabes que algún día los iaia se morirá?


Yo: No, no puedes morirte porque yo no quiero. No te dejo morirte, no te doy permiso..."


Te lo dije un día hace unos años, y me enfadé contigo por decir que algún día te ibas a morir...


"¡Aquí no se muere nadie porque yo no quiero!"


No quería... y sigo sin querer...


Y mi mente y corazón siguen repitiendo una y otra vez: "vuelve conmigo".

 


by Kinki Pulguita.

 

No hay comentarios:

Seguidores