9 de julio de 2012

Miedo y más miedo








"El miedo siempre está dispuesto a ver las cosas peor de lo que son"


(Tito Livio)





Es increíble como cambian las emociones en un abrir y cerrar de ojos...

Terminar de cenar y estar un tanto nerviosa e incomoda, sentarse con el móvil y estar en el whassap...

Llegan las ganas de llorar, te encuentras un mensaje en el whassap de Gema, dándote apoyo desde la otra parte del mundo...

Evidentemente, te emocionas, la echas mucho en falta...

Otro mensaje en el whassap.

Esta vez de un amigo, que si me apetece dar un paseo por la playa...

Sin dudarlo,sí...lo necesito, aun que no le digo nada de ello, simplemente le digo que si...

Me cambio de ropa y llega el susto, pero no llegas a ser muy consciente, no tienes tiempo de mirarte al espejo, te están esperando bajo, por lo que terminas, te peinas y sales a dar ese paseo...

Una noche muy buena, paseando por la playa, una paz, una tranquildad y buena compañía...

Pero de nuevo la cosa cambia al llegar a casa...

Llegas de muy buen humor, entras en el ascensor y por un momento te miras al espejo...

Ahora no hay nada que te impida llevarte el susto...

¿De verdad te queda tan mal la camiseta?

Llegas a casa, dejas las cosas y lo primero, te aseguras que lo que has visto por un segundo sea producto de tu imaginación...

Te quedas mirando solo un minuto, no te quedes más o no sabes que puede llegar a pasar...

¿Cómo es posible llegar a casa contenta y relajada y en un segundo te invadan unas ganas de llorar y llorar desesperadamente?

Tiene que ser producto de mi imaginación, esto no puede estar pasando.

Intentas auto convencerte que esa camiseta ya tiene sus tiempo, por lo que es normal que se te haya quedado un poco más ceñida, que puede que haya encogido al lavarse...

Pero el único pensamiento que te viene a la mente es todo enfermo...

Te han dicho que tu peso no ha cambiado mucho e incluso que has perdido medio kilo.

Mentira

Qué te van a decir si no, si te dicen que vas subiendo de peso te asustarás y harás las cosas mal...

Te han dicho que tienes que dejar de racionarte las comidas, y dejar que te las racione tu madre.

Me están poniendo comida de más para subir de peso y es lo que están consiguiendo.

Te han dicho que tienes que añadir comidas, como el desayuno y aliñar la ensalada de la comida con aceite.

Claro, si lo que quieren es que suba de peso...

¿Conclusión?

Mucha palabrería pero todo con el mismo fin, aumentar de peso sí o sí, porque se empeñan en decir que tu peso no es saludable.

¿Y quién dice si es saludable o no?

Está claro que te dirán que no lo es, que te van a decir.

Pero sin embargo tú si lo ves saludable.

Entonces... ¿quién decide si es saludable?

Pero por otro lado pienso cosas un tanto más razonables...

Es normal que hayas subido de peso, para eso están los pequeños cambios.
No les conviene que subas excesivamente de peso, no ganan nada, sólo sacarte de un problema y meterte en otro.
No es muy sano no comer nada, o en su defecto comer lo mínimo posible, lo único que conseguirías es seguir encontrándote mal...

Tanta palabrería es por algo, no hay nada que sea sí porque sí, si quisieran cebarte lo harían desde el momento cero.
Poner grandes cambios porque sí, total ¿que tendrían que perder?

¿Conclusión?

No puedo más

Pero sigues con la duda... ¿quién decide si tu peso es saludable o no?

Mi punto de vista, un peso saludable es cuando no tienes ningún tipo de problema de salud.

La salud no se resiente, estás activo, no te cansas, duermes bien y puedes mantener un ritmo de vida...

Entonces...¿porqué no es saludable?

No dejo de darle vueltas a la cabeza.

La camiseta ¿qué hago con ella?

Sinceramente, no tengo ningunas ganas de volver a ponérmela, es más, me quedaría mucho más a gusto destrozándola...

Pero seamos realista, no es la solución...

No puedo ir tirando o destrozando cada prenda que de repente vea que no me gusta como me queda, o cada día que tenga una neura, o cada momento que me coma de más la cabeza...

Ahora solo queda una cosa...

Acostarse, ponerme cómoda, cerrar los ojos y a dormir...

Todo por aguantarme las ganas de llorar.



by Kinki Pulguita


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