23 de julio de 2012

La cura de todo mal, la inocencia de un niño




"Lo maravilloso de la infancia es que cualquier cosa es en ella una maravilla."


(Gilbert Keith Chesterton)



¡¡TATA!!

Salir de casa pensando en tus cosas, totalmente ajena de todo lo que te rodea y la voz de un niño sacarte de todo pensamiento.

¡Tata!

Se baja de la bici corriendo y viene a darme un abrazo.

-¿Te encargas tú de los teatros este año también?

Sí, la Diana y yo

-¿Pero tú también estarás?

Sí, pero en Agosto, que yo me voy a Valencia el viernes.

-Jooo ¿y cuándo vuelves?

Aún no lo sé, Pero en Agosto te prometo que me tienes aquí.

-¡Vale! Así sí que mola.

Se da media vuelta para cojer la bici, se monta y dice...

¡¡¡Tata te quiero mucho!!!


Se te escapa una amplia sonrisa de y te invade una sensación de tranquilidad.
Con días así, y momentos así día a día se te olvida por completo todos los males que tienes...

Yo que estaba dándole vueltas al tema de la báscula, que estoy con el run run y a la espera de que me maten cuando se enteren que me la cargué.

Tenía un sentimiento de arrepentimiento, que ahora gracias a mi primo Aitor lo he olvidado todo por completo en menos de un segundo y me ha tenido todo lo que queda de mañana contenta.

La inocencia de todos los niños pequeños hace que se te olvide todo lo que estés pensando en ese momento, sobre todo cuando esos pensamientos no te conducen a nada bueno.

Ahora a disfrutar lo que me queda de semana  con los enanos, y luego todo un mes por delante con todos los niños del pueblo que participan en los bailes y teatros.

No hay nada más gratificante que una sonrisa de un niño en tus peores momentos...

Esperando con ansias el momento en el que lleguen mis bebés...

 

by Kinki Pulguita

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